El objetivo es establecer pautas de producción sostenibles desde la triple óptica económica, social y ambiental que presentan el viñedo y las correspondientes bodegas, en paralelo a la posible generación de actividades alternativas alrededor de la viña y el vino hacia la consecución de una economía circular y verde. Además, se persigue trasladar al consumidor de las ventajas de estos sistemas productivos y productos de calidad diferenciada, como mecanismo de ventaja comercial y aumento del valor añadido de los productos.
La soluciones que aporta este proyecto son la disminución de costes de producción a través de una mejora en la eficiencia de recursos como energía y agua en toda la cadena productiva vitivinícola; beneficios ambientales, particularmente en términos de reducción de impactos y reducción en el uso de recursos; valorización de residuos y subproductos que proporcionen beneficios económicos adicionales de prácticas de economía circular, en términos de creación de empleos o creación de riqueza; traslado a través de figuras de marca y comunicación eficaz al consumidor de las ventajas de los productos sostenibles ligados al territorio y medio rural en base a los resultados anteriores.
En el proyecto , además de IMIDA participan Bodegas, Cooperativas vitivinícolas y la Universidad de Murcia.